Si has logrado ser un experto en mixología, probablemente notes algunas diferencias respecto a los puestos de barman más tradicionales. No se trata únicamente de preparar cubatas o de servir chupitos a los estudiantes universitarios. 

Cuando trabajas en un bar de cócteles, la clientela es más exigente y las expectativas son mucho más altas. El código de vestimenta es más estricto y hay un ambiente más definido. Tienes que prestar mucha más atención a cualquier mínimo detalle. 

Tanto si estás detrás de la barra preparando las copas o en la sala sirviéndolas, el trabajo en un bar de cócteles es mucho más exigente que en el bar de la esquina. La mixología es un arte y una ciencia y se requiere tiempo y esfuerzo para ser un auténtico experto.

Todo esto puede resultar abrumador cuando estás dando tus primeros pasos en un nuevo puesto. Para ayudarte a dominarlo lo antes posible, hemos preparado una lista de consejos que te serán útiles mientras te haces a tu nuevo trabajo.

¡Qué empiece el espectáculo!

Si trabajas en un bar de cócteles, no eres un simple barman: también eres un artista. Es evidente que tu principal objetivo es preparar un cóctel delicioso, pero en este caso tu forma de prepararlo es igualmente importante.

En este tipo de bares se pretende crear una experiencia inolvidable. La intención de los propietarios de estos locales es impresionar a los clientes y esto se consigue a través de la decoración, la carta de bebidas o el personal. 

Debes ser tan atento y agradable como sea posible, no solo cuando tomes nota de los pedidos sino mientras los preparas. Tendrás que darle un toque teatral a la mezcla de tus cócteles que esté en consonancia con el ambiente del local. 

Esta es la ocasión perfecta para empezar a crear tu marca personal en el sector de la hostelería. Una marca personal sólida y una fuerte presencia en Internet te ayudarán a medida que pasas por las diferentes etapas de tu trayectoria profesional. 

Demuestra que eres un experto

Cuando los clientes acuden a un bar donde únicamente se sirven cócteles, es probable que planteen algunas preguntas. Siempre hay gente con ciertos conocimientos sobre este tipo de bebidas, pero en muchos otros casos tendrás que guiar a los clientes. Pasarás gran parte del tiempo respondiendo a sus preguntas por lo que cuanto más sepas, más fácil te resultará. 

Para ser un auténtico mixólogo, debes conocer en profundidad todo tipo de cócteles y sus ingredientes. Tienes que memorizar la carta de bebidas del local donde trabajas y ser capaz de explicar cada variedad de cóctel con un vocabulario sencillo o más profesional dependiendo de quién sea tu interlocutor en ese momento.  

Tanto si se trata de un cliente que acude por primera vez a este tipo de bar o de un experimentado bebedor de cócteles, todos darán por hecho que eres un experto en la materia. Si quieres que los clientes y tus compañeros de profesión te tomen en serio, debes estudiar sin descanso. 

Sé un buen vendedor

Dependiendo del tipo de local en el que trabajes o la zona de la ciudad en que esté situado, tomar una copa en un bar de cócteles puede ser una opción poco asequible. Los márgenes en la venta de alcohol siempre son buenos y son aún mejores en los establecimientos donde solo se sirven bebidas alcohólicas. Esto significa que debes lograr que la gente se sienta a gusto gastando una buena cantidad de dinero cada vez que pida una bebida. 

En algunos bares de cócteles, las especialidades de la casa pueden costar dos o tres veces más que una bebida normal. Esto puede resultar difícil de vender a aquellos clientes que lo único que buscan es tomarse una copa y pueden conseguirla más barata en el local de al lado.  

Por ello, debes utilizar tus mejores dotes de vendedor cuando expliques la carta a los clientes. Tendrás que resaltar todo lo que convierte tu receta de un determinado cóctel en algo único en lo que merece la pena gastarse el dinero. Si eres capaz de dejarlos sin habla con tu primer cóctel, vender el segundo te será mucho más fácil. 

Expresa tu creatividad

Para muchas personas, la mixología es una ciencia. Perfiles de sabores, ingredientes que provocan reacciones diferentes, proporciones… todo esto debe ser tenido en cuenta cuando trabajas como mixólogo.

Sin embargo, cuando domines la ciencia de la mixología y confíes plenamente en tus conocimientos de la materia, habrá llegado el momento de dar rienda suelta a tu creatividad. Es entonces cuando la ciencia se convierte en un arte.

La mayor parte de tu trabajo consistirá en la preparación de cócteles clásicos o de recetas inventadas por otra persona. Pero esto no significa que no puedas experimentar por tu cuenta. Tanto en el bar como en tu propia casa, deberías idear constantemente nuevas recetas o dar tu toque personal a las clásicas. 

Llegará el día en el que el gerente del bar te pregunte si tienes algunas ideas propias. Cuando eso ocurra, deberás estar listo con un cuaderno lleno de recetas que hayas ido perfeccionando. Nunca sabes cuándo llegará la oportunidad de demostrar lo que vales, así que tienes que estar preparado para aprovechar la ocasión cuando esta se presente.  

Por lo tanto, ¿crees que eres un buen candidato para ser un gran maestro de la mixología? Puede ser un puesto muy bien pagado y muy gratificante si logras destacar como un excelente profesional. Echa un vistazo a las ofertas de empleo de barman disponibles en Hosco y ¡empieza a preparar grandes cócteles hoy mismo!