Cuesta imaginar un sector de la restauración sin la carne como principal atracción. Pero los tiempos cambian y lo mismo ocurre con los hábitos alimentarios de las personas. En los últimos años, son muchos los que han dado el salto a una alimentación basada en plantas.

¿Podrían llegar a desaparecer los asadores como consecuencia de esta tendencia a evitar el consumo de carne?

¿Qué es una dieta basada en plantas?

Es posible que en los últimos tiempos hayas oído con bastante frecuencia la expresión «dieta o alimentación basada en plantas». Puede resultar algo confusa porque muchas personas asumen que es lo mismo que ser vegano o vegetariano. 

Los veganos y los vegetarianos siguen una dieta basada en plantas. Pero no todas las personas con una alimentación basada en plantas son veganas o vegetarianas.

La elección de una dieta basada en plantas no significa que no se pueda comer carne o productos animales. Se trata de un ajuste en los hábitos alimentarios de una persona para reducir su dependencia de ellos a la hora de obtener calorías y nutrientes.

En su lugar, las personas que eligen una alimentación basada en plantas convierten los cereales integrales, las frutas, las verduras y los frutos secos en los principales ingredientes de su dieta.

La elección de una dieta vegana o vegetariana supone un gran compromiso. Muchas personas acaban abandonando este tipo de dietas porque las encuentran demasiado restrictivas. La alimentación basada en plantas es más flexible y te permite realizar ajustes y cambios graduales en la dieta, por lo que es más fácil mantenerla a largo plazo.

¿Qué razones llevan a la adopción de estas dietas basadas en plantas?

La popularidad del vegetarianismo y el veganismo ha ido creciendo en las últimas décadas. Para muchas personas se trata más de una elección moral que alimentaria.  

Han tomado la decisión de evitar el consumo de carne o productos animales para reducir su impacto sobre el medio ambiente. Esto se debe a menudo al daño causado a los ecosistemas o al maltrato que sufren los animales como consecuencia de la producción comercial de carne.

Aunque existen personas que adoptan una dieta basada en plantas por sus principios, otros realizan esta elección por razones más prácticas. 

Muchas personas han cambiado a una dieta basada en plantas porque se sienten mejor si comen menos carne. No eliminan la carne completamente, pero reducen en gran medida las cantidades que consumen regularmente. En su lugar, intentan adoptar una dieta más equilibrada y saludable basada en las frutas y las verduras, los frutos secos y los cereales integrales para proporcionar a su cuerpo la energía que necesita.

Otra razón sería el precio de la carne que, con la inflación en máximos históricos, no deja de aumentar. Aunque el incremento del precio de los alimentos también afecta a las frutas y a las verduras, sigue siendo más económico adoptar una dieta basada en plantas que una basada en la carne. 

El confinamiento a consecuencia de la COVID-19 también animó a muchas personas a cultivar un huerto doméstico como afición. Esto les permitió ver que era posible cultivar frutas y verduras en casa de forma sostenible. Y, desde luego, es evidente que nunca será posible cultivar un filete en tu huerto casero.

¿Cómo afecta esta tendencia al sector de la hostelería?

Los veganos y los vegetarianos ya han tenido un impacto significativo sobre el sector de la hostelería en los últimos años. En las grandes ciudades es posible encontrar numerosos restaurantes que no ofrecen carne en el menú. Asimismo, la mayoría de los restaurantes ofrecen platos vegetarianos y en ocasiones incluso dedican una sección completa en el menú a este tipo de cocina.

A medida que evolucionen las preferencias de los consumidores y nos vayamos adentrando en un futuro sin carne, los restaurantes se verán obligados a prestar más atención a esta tendencia. 

Sin embargo, esto no puede consistir únicamente en incluir una hamburguesa vegetariana o un sándwich de yaca a la barbacoa en el menú. 

Los restaurantes tendrán que analizar su negocio desde una perspectiva basada en las plantas. Es probable que deban realizar grandes cambios en el menú, que tengan que trabajar con proveedores más sostenibles o se vean obligados a reciclar y formar a la plantilla para poder afrontar este cambio de estrategia. 

Disminuir la oferta de platos de carne puede suponer un aumento de los beneficios de la cocina. La carne y el queso son ingredientes caros mientras que las verduras son asequibles y versátiles. Si existe la posibilidad de formar a los chefs para que ofrezcan la misma calidad con platos basados en plantas, la cuenta de resultados se verá beneficiada.

Es evidente que esta tendencia hacia una dieta basada en plantas no es una moda pasajera. Cada vez más personas adoptan este cambio y las empresas del sector de hostelería deberían cambiar con ellas. Hazte miembro de Hosco hoy mismo para tener acceso a nuestro directorio de empresas y analizar qué marcas del sector de hostelería encajan con un estilo de vida basado en las plantas.